Almenos,
esta vez,
nos hemos salvado,
del fin de los finales.

Almenos,
tenemos el tiempo
para pensar en cómo nos podemos quitar una vértebra
para no tener que estar invirtiendo cuantiosas sumas de dinero en mantener una mujer que nos pose su boca en las partes inferiores. Así, tendremos más ganancias en las bolsas.

Almenos,
podemos reconciliarnos con el señor
regalándole
a nuestros tres mil millones de compatriotas que están en la miseria
un cuarto de un pan de 50 centavos.

Almenos podemos disfrutar un poco más de nuestras asquerosas vidas
levantarnos en nuestro Loft con sus ventanas llenas de Hollín
a afeitarnos nuestros pelillos
con las mismas cuchillas que usan los adictos sexuales del deporte.

Almenos podemos conducir el carro que compramos ayer
Para seguir llenando las autopistas de autómatas
con un kilobite más.

Almenos tenemos 25 minutos más para seguir cagándonos nuestro entorno.

Venganza erótica

El odio es el motor
El miedo es el medio

Qué más necesitamos si tenemos las herramientas?
Qué más queremos, si ya disfrutamos de piscinas climatizadas?

Acaso no ves las putas
las nalgas que se desangran en las calles

Acaso no ves los perros
que se mueren en la calle de hambre
por que, al igual que al indigente
son la mierda del estado.

Qué más nos hace falta
si ya tenemos rascacielos en construcción
soportados por las espaldas de nuestros jíbaros
que nos venden la coca que nos salva de la soledad.

Grítame
Enciéndeme el cigarrillo
Y sácame la verga del pantalón
y empieza a mamármela
que yo te la he tenido que mamar
desde el momento en que abrí los ojos
desde el momento en que me enseñaron que así no hubiera hecho nada
tenía que pintarme una cruz de mierda para liberarme del pecado original.

Adelante
abre la ventana y dispárale a los travestis
Para tí no tienen alma, sino unas tetas de sobra

Ya para qué
Si nos arrebataron las esperanzas
Ya para qué
si con nuestras tetas también se llevaron nuestra libertad
Ya para qué
Si nos lograron someter a esos libros y a esas cruces de mierda.

Crucémonos
más bien
Veamos el mundo mientras vomitamos en el hinodoro.